Me cuenta mi madre que al tener 6 años de edad, mi abuelo la despertó esa madrugada del 23 de Enero de 1958, la tomo en sus brazos y la llevo al balcón, al mismo tiempo que le señalaba donde mirar, le decía: “ese avión que se esta alejando de Caracas, es la vaca sagrada, allí va el Dictador Marcos Pérez Jiménez, hoy por fin terminó la Dictadura en Venezuela”…
Terminó una época de terror, de abusos, de torturas despiadadas ejercidas por la Seguridad Nacional, donde muchos cayeron, por defender la Libertad de Expresión, porque para ese entonces había y existía una Unidad Absoluta, los Ciudadanos, Estudiantes, Periodistas, Trabajadores, Ingenieros, Profesionales, Militares, Políticos, la Iglesia; todos estaban unidos luchando por una causa: la salida de la Dictadura que teníamos, y que Marcos Pérez Jiménez quería prolongar en el país hasta la eternidad. Esa era la razón y causa de esa lucha, ese fue el riesgo que muchos corrieron, allí pocos eran los que se encontraban de acuerdo con él, pocos eran los que vendían su patria y honor, por intereses económicos… pocas eran las focas que aplaudían los discursos e ideas de las políticas terroristas de ese Dictador.
Para ese momento tan delicado en el país, la historia cuenta que el Gobierno de Pérez Jiménez estaba obligado según la Constitución sancionada en 1953, en convocar a unas elecciones, para elegir al Presidente de la República por voto directo y secreto, el movimiento que luchaba en contra de la dictadura utilizó esa circunstancia planteando al Gobierno llamar a Elecciones. Efectivamente el Régimen llamó a un plebiscito ese diciembre de 1957, pero lo manejó de tal manera para que solo se pudiese elegir a Pérez Jiménez; dando como resultado un fraude, esto rebosó la paciencia ciudadana y a partir de allí…los días del la Dictadura ya estaban contados. El 21 de enero la Junta Patriótica llamo a una huelga general, que se cumplió en todo el territorio nacional; ya todo estaba decidido, esa unidad y lucha de todos los sectores del país, daría como resultado la mayor recompensa y alegría que pudieron imaginar…la caída del Régimen Dictatorial de Marcos Pérez Jiménez, huyendo del país esa madrugada del 23 de Enero, en su “vaca sagrada”.
Me atrevo a preguntar desde mi batido panorámico, si esta violación a la Carta Magna que se realizará el 15 de Febrero de este año, no seria como un plebiscito para el Magnánimo Emperador…, la realidad es en muchos aspectos diferente, por las posiciones complacientes en muchos sectores del poder, pero el país esta harto de sentirse burlado y que no tenga derechos, el ciudadano, los Estudiantes, los Periodistas, los Trabajadores, los Ingenieros, los Profesionales, todos nos encontramos cansados de 10 años de discursos llenos de odio, de inseguridad, de vivir en una anarquía, en un país donde no existen derechos, ni leyes; por eso y por más no dudare en votar ese día por el NO, porque no quiero un Tirano eternamente en el Poder .
NO ES NO!!!!
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